Las producciones regionales que daban fisonomía a un campo diversificado con una sólida estructura sociocultural han sido sistemáticamente reemplazadas por un nuevo modelo de organización territorial rural ligado casi exclusivamente a la producción de bienes primarios de exportación. El objetivo de esta investigación consistió en demostrar que la pérdida de bosques nativos y el consecuente impacto en el clima son resultado del avance de la frontera agrícola en la Provincia de Chaco. La metodología se baso en la búsqueda y análisis de información de fuentes secundarias, la recopilación de información in situ y la realización de entrevistas no estandarizadas de carácter general. Se concluye que los conflictos que se generan entre la habilitación de tierras para la ampliación de la frontera agrícola y los argumentos a favor de la conservación de los Montes Nativos, se resuelven a favor de la agricultura sin evaluación previa de la aptitud productiva del suelo ni de la implicancia que tendrán los desmontes respecto de laconservación de la biodiversidad y el inevitable impacto en el clima. Estas modificaciones influyen drásticamente y generan un escenario territorial con grandes desequilibrios: incendios forestales, extinción de especies, alternancia de inundaciones y sequías prolongadas, desertificación. Si los bosques continúan siendo destruidos, los patrones globales del clima se tornaran más inestables y extremos.