Además de los problemas que afectan a la salud física de los trabajadores, se ha verificado que las consecuencias de los factores de riesgo psicosociales en el trabajo predominantes producen sufrimiento y dada la unidad del ser humano en sus dimensiones físicas, psíquicas y mentales, finalmente se somatizan (Neffa, 2015) El progreso acumulado con los estudios empíricos y las investigaciones promueven un gran cambio epistemológico:
- no se trata de un problema individual porque afecta al colectivo de trabajo, - no es una realidad invisible sino que ha sido invisibilizada por ignorancia y falta de conciencia para no gastar en prevención, - no es una fatalidad porque la prevención es posible como se experimenta en numerosos países y no solo capitalistas industrializados, - no es un problema que lo puedan resolver los empresarios solos sin la participación de los trabajadores que sufren, vivencian y perciben el impacto de los riesgos.
Los daños para la salud ocurren cuando hay deficiencias en las CyMAT y no se previenen los RPST sintetizados en los seis ejes mencionados y cuando hay trabajadores víctimas del los RPST la solución no es “curar” individualmente al trabajador, sino cambiar el trabajo para que ese fenómeno no se reproduzca.
La conclusión final a la cual llego es que 1) el trabajo no es patógeno, 2) en el origen de los TPST está el contenido y la organización del proceso de trabajo.