Hipócrates (460 a.C.) dijo “la salud y la enfermedad en el hombre, no solo están en relación con su organismo, sino también con el medio ambiente, especialmente con los fenómenos atmosféricos”. El medio ambiente es el conjunto de factores físicos, naturales, estéticos, culturales, sociales y económicos que interactúan con el hombre y su comunidad. Forma parte de la vida del hombre, su organización y progreso como un ente holístico, cuyas interrelaciones originan procesos de cambios en todos sus componentes cuando se produce un impacto en alguno de ellos. En 1982 la OMS reconoció que muchos proyectos de desarrollo podrían ser peligrosos para el ambiente y en consecuencia causar riesgos sanitarios importantes. Un ejemplo lo constituyen las represas generadoras de energía eléctrica en el curso de los grandes ríos. Asimismo, deben considerarse la extensión de las fronteras agropecuarias, caminos, deforestaciones, etc. La temperatura, la humedad relativa ambiental y las lluvias, que modifican su régimen debido a los impactos ambientales, ocasionan importantes consecuencias para la salud humana, particularmente generando multiplicación de vectores de enfermedades endemoepidémicas, además de otras variadas patologías, entre ellas, las ocasionadas por estrés. Las patologías no tienen fronteras y la alteración producida en un área determinada no solo se manifiesta en la zona comprometida y su entorno inmediato, sino que también se producen alteraciones en áreas vecinas, sin poder establecerse un límite preciso.