La modificación del ambiente por factores naturales y antrópicos posibilita la aparición de Enfermedades Infecciosas Emergentes (EIE) y Reemergentes (EIRE) de origen zoonótico o no zoonótico. El concepto actual de Una Salud no sólo considera el bienestar humano, sino que también engloba la salud animal y la de los ecosistemas. Esta mirada sobre la salud, conlleva a un cambio de paradigma bajo un enfoque inte-gral y multifactorial de la ecología de las EIE y EIRE, con un fín estratégico del cuidado de la Saludde los humanos a nivel Global. Ejemplos de (EIE) son el Síndrome Respiratorio Severo Agudo, la Fiebre Hemorrágica del Ébola, la Fiebre del virus del Nilo Occidental, la Peste, la Enfermedad de Lyme y la Rabia, y de las llamadas (EIRE), la enfermedad de Chagas-Mazza y la Leishmaniasis. Todas estas enfermedades pueden ser abordadas desde la óptica de Una Salud, incorporando una tríada de conexión entre fauna silvestre y doméstica, el ambiente y el ser humano, como componentes de un sistema con el fin de detectar, alertar, prevenir, controlar y manejar de manera sostenible las zoonosis y las enfermedades de trasmisión alimentaria. La salud humana, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se define como un estado de completo bienestar físico, psíquico y social, el cual implica la vinculación con la salud y bienestar de la fauna silvestre y doméstica y la ecosalud ambiental. Una Salud forma parte de una estrategia de abordaje transdiciplinaria entre los científicos, la comunidad y los gobiernos, basándose en la participación y la equidad en el cuidado de la salud planetaria, bajo el concepto de un cambio global para el desarrollo sustentable. Diversas enfermedades infecciosas emergentes y reemergentes, están en aumento tanto en humanos y como en animales, afectando la producción, la salud pública y la sanidad animal.